miércoles, 4 de marzo de 2009

Focus

Este es un pequeño resumen de idas y venidas de algúno que otro viaje de Costa Rica hacia algunos países latinos que hice un tiempo atrás, añorando no solo volver sino talvéz quedarme algún tiempo en alguno de ellos, por trabajo, aventura o ideología, no importa el motivo, es solo estar en constante movimiento, no pasar el resto de mi vida en un solo lugar... bueno tal vez si pero saliendo.


Buenos Aires querido.

Hace muchos años salí de un país, el que me vió nacer, el que no recuerdo de pequeño y no volví hasta cuando era grande y tenía uso de razón, todo eso que me contaban, del amor que genera un pedazo de tierra, la calle, la vida nocturna, el ambiente universitario, la música, los bares, el fantástico y bienquerido futbol, los asados y su asquerosa vida política. Ese país que tiene tanto recurso humano, natural e industrial y que podría subsistir sin necesidad de estar al margen de los demás, no entiendo como a estas alturas no nos damos cuenta de el desperdicio y como se desaprovecha la tierra de un lugar donde casi el 70% de este país esta deshabitado, con una de las tierras mas fértiles del mundo, con bellezas naturales que se pueden explotar turísticamente y que cualquier país se envidia tener estas oportunidades.
No se como un país con esa falta de cariño, pues amor por este país sobra, puede tener una población tan infeliz, teniéndolo todo en la mano y lo poco que se dejan por otro lado se los roban.
Una argentina tan mágica como maldita, tan fría como caliente, tan seca como húmeda, es tan argentina como su gente.




Brasil


El pequeño vistazo que le dí a este titánico país, donde todo es grande, inmenso, abominable y sí, hay mucha y tanta gente que no sabe leer ni escribir, también gente que no ha visto civilización, esa Amazonas que solo el nombre da miedo, como su selección de futbol y sus mujeres, algún día...algún día volveré y si no me quedo, traeré a mis queridos los mejores recuerdos.









Cárcel de su cárcel


De los pocos países que conozco, Cuba quizás es el que más me llama la atención, no solo por su historia sino por la forma en que se desenvuelve, un país tan atrasado que es moderno, sus profesionales son de envidia y el conocimiento de la vida y esa apertura mental, mas no así social, hace que los cubanos sean diferentes al resto de habitantes de algún país que he conocido, en general es fascinante hablar con ellos, escuchar sus historias, sobre todo de la gente mayor, los que vivieron el bloque y los que todavía viven y vivieron la famosa revolución. Es un lugar que hay que ir mientras Fidel este vivo, sino no tiene sentido.




Regreso a casa

Una vez terminado este pequeño viaje, solo pude terminar resignado en que algún día seguiré en mi viaje, ahora solo queda seguir tomando café frente al escritorio de mi compu, o mis queridos te verdes sin azúcar en mi trabajo o almorzando en casa de mi madre cada vez que puedo y visitar a mis amigos de infancia cada vez que puedo.